El bebé ahora necesita ver y tocar cosas diferentes para poder aprender a diferenciar distintas texturas, temperaturas, pesos y sonidos.
Empieza a mostrarle sus manos y pies y haz que los siga con su mirada.
Puede también llegar a emitir algún sonido nuevo, repítelo si lo hace.
En esta etapa es conveniente que le des objetos de diferentes texturas para que vaya aprendiendo lo que es duro, blando, suave o áspero.
Al pasearlo, sosténlo de manera que pueda ver todo lo que lo rodea y acércalo a aquellas cosas que le llamen la atención para que las pueda observar detenidamente. Si intenta tocarlas y no es riesgoso déjalo experimentar por sí mismo.
1 comentario:
Muy interesante. La estimulación temprana es fundamental a la hora de optimizar el adecuado desarrollo físico y cognitivo de los menores.
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